Ayer era uno de esos días que vienen marcados en negro en el calendario anual, uno de esos días en los que te preparas para estar triste y tener una jornada la cabeza en las nubes para intentar anestesiar la memoria.
Pero cuál fue mi sorpresa al encontrar ,aún no se dónde las fuerza y las ganas de cambiar el signo del día.
Supongo que todos los propósitos valdíos que cada 31 de diciembre hacemos para el año nuevo , cobraron fuerza en el día de ayer por alguna alineación astral que desconozco por completo pero ... Funcionó!
Inicie el día desayunando aquel resto de all bran, que todos dejamos intencionadamente al fondo de la despensa para justificar que somos gente sana, deportista y comprometidos con nuestro propio cuerpo, porque sino alguien comería tierra prensada en forma de palitos de color arena ? Porqué los publicistas nos han vendido el paquete completo , es sano , te embellece y te hara, a la larga entrar en las tallas de Zara.
Después de eso me subí al coche con el alma leve y el pie ... También ! Porque mi recién estrenado estatus de mujer desempleada me ha liberado del estrés del tráfico y de la esclavitud del reloj. La combinación de ambas mata anualmente a más personas que la hipertensión arterial. Así qué , ayer y sin que sirva de precedente conduje sin maldecir a los otros conductores , parando en los pasos de peatones sin miradas torvas y sin sacar el pedal del acelerador de mi más que modesto utilitario.
Aún con el efecto all bran en mi cuerpo pasé de largo de no sólo una, sino tres panaderías estratégicamente colocadas para hacerme caer en la tentación del dulce, y llegué al banco al que me dirigía sin más incidentes. Ir al banco no tiene nada de especial para la mayoría , pero yo lo odio especialmente , detesto los números , el dinero y a los bancarios y , son tres elementos de la misma ecuación ! Así que por un día , me ocupe y no me preocupe de los tediosos asuntos financieros y sin hacer cola y eso ya es un milagro en sí mismo.
Volví a casa y cociné ,mientras charlaba animadamente con mis hijos sobre su rutina diaria , les ayude con los deberes de matemáticas , lo que supone para mi una doble tortura,y vi dos capítulos de insufribles series para adolescentes de esas de amor, animadoras y canciones sazonadas con bailes y ropas brillantes. Dimos por tanto vida a la mejor postal familiar , sólo me faltó llevar un delantal con flores.
Dediqué un par de horas a mi rutina de internet ,aproveché para hablar con una amiga de la que hacía mucho tiempo que no sabía y navegué por un océano profundo llamado ,apple store ! creo que ya voy entendiendo el porque el iPhone y el iPad vienen sin instrucciones ! Porque las tienes que comprar también, estoy segura que para algo más que para pasar las fotos con el dedo tienen que servir ! Bueno para eso y para presumir , porque nobleza obliga !.
Después de una ducha relajante y de la terapia de cremas, sérums y limpiadores que mi edad me impone para paliar los efectos de la gravedad y demás leyes físicas, me fuí a leer a la cama , un libro malísimo que sin duda me va a costar más trabajo leer del que le dió a su autor escribir. Pero no me rindo, aunque sólo sea por publicitar luego a los cuatro vientos lo malo que es ...
En fin que ayer encontré cientos de motivos para no recordar porque debia estar triste ... Y porque ? Porqué debemos estar tristes ? Ahora mismo no se me ocurre ninguna razón , seguro que el día de mañana me refresca la memoria ....